---- UNA VUELTA POR LAS HIGHLANDS
E ISLAS EXTERIORES ----
Quien viaje a Inglaterra -ese país que tiene
tres selecciones nacionales de fútbol - pues cuenta además con la del País de
Gales y la de Escocia- debe saber que desde que cruzó hacia el Norte las
colinas de Cheviot se halla en Escocia, país diferente de otros por los clanes,
cada uno de ellos con su característico tartán, la gaita, y el whisky, entre
otras cosas.
Es una tierra llena de
historia, pues fue pisada por los antiguos escandinavos, rudos guerreros
vikingos que llevaron sus naves a las Feroe, Orkney, Shetland e Islandia en sus
correrías marítimas hacia Groenlandia, dejando palabras rúnicas en la Hébridas,
hasta mediados del siglo XIII. Islas todas donde se encuentran menhires, restos
celtas y algunas minas de oro, plata y plomo que excavaron las legiones -pues
hasta por aquí llegaron los límites militares del Imperio Romano, conforme lo
atestiguan los restos hallados- y donde a fin de Agosto se celebra la marcha de
los Mil Gaiteros.
En el vestido
tradicional masculino destaca su célebre falda, o "kilt", cuyo borde
debe rozar el suelo cuando se arrodilla su portador, que luce en su tejido la
vistosidad de colores que caracteriza a cada clan; indumentaria en la que
destaca su camisa con una chorrera de fino encaje sostenida por un prendedor de
oro, así como sus brillantes zapatos de pulida hebilla metálica, vestimenta con
la que se presentó el actor cinematográfico Sean Connery para ser armado
Caballero del Imperio Británico por la reina Isabel II.
Sus dos grandes
poblaciones son Glasgow, el centro comercial e industrial más grande del país,
y la capital Edimburgh, ésta última con su famosa "Milla Real" y los
dos puentes sobre el Forth, ferroviario el más antiguo en un alarde de
ingeniería del acero, y el segundo para vehículos, colgante y con una fina
silueta de más de dos kilómetros, que permiten un rápido acceso a la amplia
región de las Highlands o Tierras Altas.
Aquí cambia el paisaje y
varía todo desde el momento en que se comprueban, por los buenos catadores, las
diferencias y excelencias de unos whiskys en cuya elaboración se utilizan las
más selectas maltas junto con las cristalinas, puras y gélidas aguas que brotan
de manantiales, entre rocas azotadas por el viento que barre las praderas junto
a los montes Grampianos,
con un clima duro y áspero, en el Norte de las Highlands.
Edimburg
Empezando desde el
Sureste de Escocia, por las Lowlands, en latitud más baja que Edimburgh, se
encuentra Pencaitland; junto a un manantial al pie de las colinas está la
destilería fundada por los Hermanos Rate en 1817, lugar de maduración durante
diez años de un peculiar whisky que tiene un aroma delicado y fino, ligeramente
seco. Es el GLENKINCHIE,
elaborado destilando una de las mejores cebadas de Escocia.
En la región norteña,
que tiene sus costas azotadas por las aguas del Mar del Norte, en el valle del
río Spey se encuentra el parque zoológico de Hihgland Wildlife Park, cercano al
puerto de Inverness desde el cual parte el canal Caledonian que, con sus dos
tramos al Norte y al Sur del célebre Loch Ness comunica, a través del mismo,
este Mar con el Océano Atlántico.
Los aficionados a la
aventura -y a intentar ganar premios- se pueden alojar en el Loch Ness Lodge
Hotel, en Drumnadrochit, como base de operaciones para intentar localizar el
famoso, desconocido y casi mítico monstruo que, si existe, está bien protegido
por las aguas excepcionalmente profundas del lago, el cual se inicia a seis
kilómetros de Inverness. Más al Sur, en la zona alta del Spey, en un cruce de
carreteras, se encuentra Dalwhinnie -que en gaélico significa "lugar de
reunión"-; allí se halla la
destilería más alta de las Highlands donde, pese a su aislamiento y mal clima,
tienen la paciencia de hacer madurar durante quince años una excelente malta
con las aguas gélidas del manantial cercano a Lochan an Doire-uaine.
El Clan de Lonach con su
tartán verde y negro
También, dando cara al
Mar del Norte, se encuentra la histórica y brumosa Aberdeen, la "Ciudad
Granítica", con tres catedrales, el principal y mayor puerto de Escocia, a
orillas del Dee, valle por el que baja el Clan de Lonach con su tartán verde y
negro en Agosto, ciudad en la que se puede comer al gusto escocés (Taste of
Scotland) y pasar una alegre velada en el cabaret del HOTEL IMPERIAL, tomando
un trago de un whisky con 12 años de cuidada maduración, con mucho cuerpo y
agradable paladar de malta
ahumada, recomendado para saborear como colofón a una exquisita cena,
criado cerca del castillo de Ballindalloch, al pie de las colinas Craggan Mor, de las cuales toma el
nombre.
Hacia el interior, en
esta zona, junto al río Dee, está situado el Castillo de Balmoral, residencia
veraniega de la Familia Real británica, en territorio de fortalezas al amparo
de los Montes Grampianos, desde donde, por estrechas y serpenteantes carreteras,
rodeadas de un paisaje de abruptas montañas, con brezales en septiembre, se
asciende en dirección a Tomintoul, la ciudad más alta de las Higlands, muy
próxima al pico Carn Mor, de 2.638
m., el segundo en altura de los Montes Grampian para
descender después hacia Dufftown, en Banffshire, ya en la zona baja del Spey,
donde se hallan las Destilerías William Grant & Son Ltd., líder mundial en
la venta de un whisky de 12 años, cuya suavidad se la proporciona las aguas de
su propio manantial que empapa la cebada tostada, madurándola durante más de 8
años para obtener el suave GLENFIDDICH
("Monte del ciervo" en gaélico) que, junto con el Blended hecho con
el mejor grano de trigo y una destilación triple en barricas que se usan una
sola vez para envejecerlo, son envasados en la conocida botella triangular
famosa en el mundo entero.
El whiky escocés LOCH CASTLE se elabora con wiskys de
malta o cereales de varias destilerias de Escocia, envejecidos en barricas de
roble durante al menos 3 años. Posteriormente son mezclados (blended) y
embotellados en Kiltarie Distillers obteniendo así este producto que hace años
se denomina en gaélico uisge beatba o
usquebaugh
Si se parte de Inverness
siguiendo la ruta junto al Loch Ness hasta Invergarry, para cruzar el puente sobre
la cabecera del Loch Claunie, viajando por la carretera con este lago a la
izquierda, se pasa junto a Five Sisters (colinas de las Cinco Hermanas, con un
picacho de 1.068 m.)
hasta Shiel Bridge para llegar hasta al castillo de Eilan Donan, baluarte de
los Mac
Rae; después se continua hacia Kyle of Lochalsh para tomar el ferry
hacia la brumosa isla de Skye, con una salvaje belleza de montes y altos
páramos sobre lagos azules, donde se deslizan los claros arroyos entre abedules
plateados y se encuentra, entre otros, el antiguo Castillo de Dunvegan -durante
siete siglos sede de los jefes del clan Mac Leod-, lugar donde está la única
destilería de esta isla, la cual elabora el whisky TALISKER, con un aroma exuberante que estalla en el paladar.
Castillo de Eilan Donan, baluarte de los Mac Rae.
Quien desee contemplar
los restos que dejaron en la isla de Harris y Lewis, cara al Atlántico y a
Islandia, unos primitivos y antiquísimos pobladores. sólo tendrá que ir al
puerto de Uig, en el norte de Skye, para tomar el ferry que lo llevará hasta
Tarber donde, sobre una colina, cerca de Loch Roag, se yerguen los grandes
megalitos, con altura doble o triple a la de un hombre, formando cuatro
avenidas con direcciones Norte, Sur, Este y Oeste y, en la convergencia
central, una piedra más grande que las otras frente a la salida del Sol, al
cual adoraban hace unos 3000 años, antes de que se establecieran los celtas con
el gaélico, su idioma propio.
Isla con un suelo
agrícolamente pobre, que solo sirve para criar ganados vacuno y lanar, aunque
en la tierra buena se puede criar heno, trébol y verduras, cubriéndose sus
colinas de coloridos brezales en verano y donde la turba comenzó a crecer hace
unos 8000 años, cuando el clima cambió de
cálido y seco a frío y húmedo, devorando el musgo junto con los
bosques de abedules y nogales que antes la cubrían, dando origen a las turberas
de las que se saca el combustible para resistir los fríos invernales, cuando el
mar golpea la costa y las peladas peñas son azotadas por vientos y tormentas,
brumas y cierzos. Aquí su principal industria es el tejido de lana para hacer
la mezclilla y la pesca de arenques en el mar alternando, como deporte de sus
habitantes, con la del salmón en profundas calas.
No se acaba aquí la bebida,
pues ya en las West Highlands, en Oban, puerto escocés situado en la majestuosa
bahía del Firth of Lorn, frente a las islas Hébridas, esperan un año menos que
en Dalwhinnie, en este caso 14, para poder ofrecer un whisky que une la dulzura
de una malta del SPEY con el
suave toque a turba de un ISLAY.
Finalmente, en la isla
de Islay, situada entre Escocia e Irlanda, en lugar cercano a Port Ellen,
encontramos la distinción de la costa Oeste: los 16 años de envejecimiento de
un whisky de excepción, el LAGAVULIN,
con una aroma fuerte y poderoso, que nos hace recordar, en el dicho de Aberdeen
y en el sentimiento de toda Escocia, la expresión de su amistad cuando nos
manifiestan: Encantado de conocerle, pesaroso de separarnos y dichoso de
verle nuevamente.
JOSÉ MARÍA VELA URREA
No hay comentarios:
Publicar un comentario