LENTITUD

2017-05-18                           LENTITUD

Hay que ver lo despacio que van algunos asuntos en este País. Se está hablando ahora, en 2017, de cosas que sucedieron en 2011. 2001  y años atrás, siendo  curioso lo que ocurre con los medios de comunicación, cuando hablan mucho tiempo, a veces años, sobre determinados casos  y, de pronto dejan de publicar nada. 

Por lo visto obran acordes con el viejo dicho periodístico de que “nada hay más viejo que la noticia de ayer” y, claro, en cuanto desde algún sitio, posiblemente,  presionan para que se callen, se ponen firmes , dicen “Si bwana” y no se vuelve a saber nada de  asuntos que olían nauseabundamente mal.

Por otro lado solo hay que ver televisión o escuchar noticias de radio para descubrir las grandes diferencias existentes entre diversas formaciones políticas, algunas como el Partido Socialista que, según recientes noticias, casi ha desaparecido en Francia y que aquí, en España, atraviesa momentos de gran incertidumbre con una gestora varios meses a su frente y abocado a elegir nuevo Secretario General, lo cual me lleva a formular una pregunta : ¿Ha investigado alguien cómo, porqué y quienes han originado esos desbarajustes, en Francia y en España, que entiendo les debilitan, cuando existen la Comisión de Conflictos y el Comité Federal para el cumplimiento de Estatutos y Reglamentos?

También  el que, en parte de diversas agrupaciones, desaparecen los principales conceptos que las distinguían desde el momento que se integran en una nueva formación.

Algo parecido ocurre en elevados sitios de la judicatura, lo cual redunda, en este caso, en perjuicio de que se imparta Justicia rápidamente y como debe de ser, en vez de meterse en legalismos y zarandajas mientras intentan averiguar “si eran churras o merinas”, obrando  en muchos casos, con lentitud exasperante o con traslado de Jueces, aunque también hay quienes abandonan los casos que instruían para acceder a una plaza superior, (no siendo óbice siguiera con su trabajo -por conocerlo bien- hasta finalizarlo), eternizándose éstos hasta que se nombre a otro magistrado para continuarlos, el cual precisará un tiempo para conocerlos y actuar, llegando las causas al siglo XXV, no por la importancia de los casos -pues muchos están más claros que el agua-  si no por éstas y otras trabas que ponen algunos al  acogerse “por razón de nacimiento y cualquier otra condición o circunstancia personal o social” (exclusión figurada al final del Art.14) para gozar de privilegios reservados solo para los de “su clase”, siguiendo en libertad mientras se pudre en un penal alguno de los antaño “ladrones de gallinas”. 

Hay muchos asuntos que se remontan al siglo pasado y que siguen sin aclarar. Si la Justicia actuase sobre todos los implicados con un embargo preventivo de todos sus bienes, muchos de imposible justificación y totalmente localizados,  permitiendo solo un reintegro mensual de 500 € -superior a lo que perciben algunas familias- y los enviaran provistos de una manta a dormir en tiendas de campaña en algún campo de trabajo, no sería preciso llegar hasta el chantaje informático para que apareciesen los miles de millones ocultos en paraísos fiscales.

Estimo que debe de actuar ya, y rápidamente, la Dama de los ojos tapados, haciendo se cumpla lo que establece muy claramente el Artículo 139.1  que dice, “Todos los españoles tienen los mismos derechos y obligaciones en cualquier parte del Estado.” 

Pero estamos en España, donde se aplica el refrán que termina “el que puede, apaña”.

Murcia 18 de Mayo de 2017                 José María Vela Urrea